martes, julio 05, 2005

Diferencias entre sexos

Dedico este comentario a Amelí...

Los tíos somos muy simples, eso es verdad. El hecho de que diálogos como:

- ¿Has visto a Elena?
- ¿Qué Elena?
- ... con melena (sustituyan los puntos suspensivos por la denominación vulgar del miembro viril masculino en formato posesivo de primera persona)

Nos hagan gracia a pesar del paso del tiempo o de la cantidad de veces que lo digamos expresa la simplicidad de nuestra especie. Otros ejemplos podrían ser los deportes, Cálico Electrónico, reir de forma grosera después de un comentario más grosero aún, etc.

Esta simplicidad provoca otro efecto como es el que entre nosotros no nos piquemos con tanta facilidad. Es decir, si un colega la ha cagado se lo dirás y tan amigos... o no, pero se lo dirás. Es difícil encontrar piques de este tipo entre tíos.

Por otro lado tenemos al divino tesoro de la humanidad: la mujer. Ellas (vosotras) son o sois más complicadas. La estructura de vuestros pensamientos es más compleja y probablemente más evolucionada que la nuestra. Por ejemplo buscar terceras, cuartas o octavas interpretaciones a lo que otra persona os ha dicho (sobretodo si la otra persona es una chica).

Esa complejidad del pensamiento de una mujer repercute sobre las relaciones entre hombres y mujeres. Comentarios como "¡qué simple eres!" no nos afectan porque ya lo sabemos... somos simples y más felices así. Ciertamente somos más primarios y nos dejamos llevar muchas veces por nuestros instintos animales pero es que... muchas veces es más gracioso!

A veces tratar con una mujer no es fácil (como la vida de un superhéroe ;)). Tienes que ir con cuidado con lo que dices porque a lo mejor piensa, cree o interpreta una cosa diferente a la que tu quieres expresar. Por ejemplo:

- Él: Qué guapa estás hoy!
- Ella: gracias (y seguidamente crea una barrera infranqueable porque cree que él se la quiere chuscar y dejarla tirada como una colilla... en algunos casos esto no es descartable).

¿Sabéis lo que cuesta superar esa barrera y demostrar que eres una persona honrada? Porque claro todos los tíos por definición somos unos cabrones del copón y lo único que buscamos es aliviar nuestra carga vital con todas las mujeres posibles. Ya sales como culpable (lo de la presunción de inocencia es imposible... eres un cabrón hasta que se demuestre lo contrario).

Por cierto, todos los tíos sabemos que también por definición somos unos cerdos del copón. Costará siglos desechar esa idea del cerebro femenino. Los patos saben nadar al nacer y las mujeres saben que somos unos cerdos y unos cabrones desde el minuto cero de su existencia.

Pero una cosa más curiosa aún para demostrar la complejidad del sexo femenino: cuanto más cabrón eres más triunfas con las chicas. Esto es algo empírico y todo el mundo lo sabe (al menos los tíos). Otro día hablaremos de las diversas formas de cortejo y cómo te puedes convertir en el amigo que no se come un torrao a pesar de tener hambre para parar un tren mientras observas que algún cabrón (porque ese sí que lo es) realiza prácticas amatorias anheladas por ti.

Gràcies!

Petons i abraçades

Raül

6 comentarios:

Anónimo dijo...

No es que no quiera comentar nada, es que estoy cogiendo carrerilla...

Besos promiscuos
Amelí

Anónimo dijo...

Por alusiones y comentarios posteriores con el autor de este blog, debo comentar un par de cosillas.
Pues no estoy de acuerdo con este comentario Raül... no señor. Especialmente con la parte en la que aseguras que los tíos cabrones se llevan a todas las tipas. Y
Antes de que me llames vendido, déjame explicarme.
Tú metes en el mismo saco a los cabrones y a los tipos que simplemente practican el arte de la promiscuidad sin complicaciones. La diferencia entre un cabrón y un ligón es la verdad. Así que puedes ir con muchas chicas y no ser un cabrón. Los cabrones, al fin y al cabo, acaban no ligando tanto porque se les ve venir. Pueden ligar al principio, pero como dice el dicho: se pilla antes a un mentiroso que a un cojo.

Además, a las chicas les gusta tanto el sexo como a los chicos, sólo se trata de respetar y hacer sentir bien a la otra persona cuando está contigo. Y eso no es de cabrón, eso es simplemente no poner complicaciones a cosas que no deberían ser tan complicadas. Y estos últimos no son cabrones... no?

Besos para ellas y abrazos para ellos.
Amelí

Anónimo dijo...

yo va a ser que tampoco acabo de comaprtir todo lo que dice este articulo, y hasta estoy deacuerdo con las opiniones del usuario anónimo.

Esta claro que -no se porque- las feminas se sienten atraidas por los tipos que son mas cabroncetes, o que almenos lo parecen; pero hay una fina linea, más ancha de lo que la mayoria considera, que separa a los realmentes cabrones de aquellos que simplemente no buscan el amor de su vida a cada opotunidad. Los dos extremos me parecen bastante tristes, quiza uno más que otro...

También me molaría destacar que si realmente las mujeres quieren algun tipo de igualdad, la sociedad debería dejar de considerarlas tan inocentes, incluso entre ellas, y dejar de creer que cuando una tia se deja acompañar por un tipo con pinta de malote, esta no es plenamente consciente de las ventajas y los inconvenientes que ello comport; vamos que no se chupan el dedo ni la mitad de lo que parece...

besos abrazos y collejas

Anónimo dijo...

Mira que hay hombres de verdad
Con buen trabajo y con prosperidad
Esbeltos, altos, guapos, listos, fuertes
Rubios, moreno... incluso con pelo
Que no se quedan en casa el domingo
Que van al campo contigo y sus hijos
Hombres que pueden vivir sin partidos
Y no te pegan si pierde su equipoooo


Ni soy un principe ni soy azul
Ni soy el hombre que mereces tu
Si quieres que te diga la verdad
Cuando elegiste lo hiciste fatal

Y ciertos machos sueltos por ahí
Siempre dispuestos a matar por ti
Si alguien se hacerca mira con deseo
Te toca el culo o peor un pecho
Capaz de saciar tu hambre de sexo
Después del quinto capaces del sexto
Y no les costara ningun esfuerzo
Postura que no sea el misionero...

Y con instinto de partenidad
Para los niños que te pedira
Y gran paciencia gran serenidad
Para educarlos y ser buen papa
Y castigarlo si fuera preciso
Si ellos dijeran culo caca pito
Desheredarlos si no consiguieran
lo que su padre nunca ha conseguido

Tontxu

Anónimo dijo...

Vamos a ver.
Para empezar estoy de acuerdo con Amelí y con el de las collejas que me ha jodido el cierre, mercy.
Ser simple es un don del que las mujeres se quejan y se aprovechan al mismo tiempo.
Realmente lo del "tío cabrón" no funciona, sabéis por qué? porque las cabronas son ellas, ellas mandan, hacen y deshacen, te avisan, te coaccionan y te hacen chantaje. Eso, eso es ser cabrón, no no, CABRÓN(as).
Aquí las únicas víctimas del arte amatorio somos los hombres, por muchas historietas que tengamos que contarnos, porque al fin y al cabo acabamos todos pasando por el aro. Es muy complicado pero quiero resumirlo con palabras de Raúl y mías: viva el divino tesoro de la humanidad: las mujeres cabronas.

MERCY MAN.

Anónimo dijo...

Bueno... primero estar de acuerdo con Raül y con otros tantos que pensarán como él: los tíos sois algo simples. Pero ser simple, no conlleva a ser estúpido o inmaduro. Cierto es que pocas chicas se reirán con vuestros groseros comentarios… Pero…
- Quién es Constantino?
- El que me la chupa haciendo el pino.

- Quién es el vasco?
- El que te dejó el culo hecho un asco.

- Teorema de Carlos...
- ¿Qué Carlos?
- El de los cojones largos!...

Sí, soy mujer, y me he reído en ciertas ocasiones con comentarios de este tipo. Y no por la simplicidad de mis pensamientos (o eso creo!). Reírme de esto quiere decir que soy una persona simple? No lo veo así. Según la persona que lo dice, la gracia con que lo dice o la situación del momento, yo me reiré. Ahora, si el comentario lo hace alguien que se quiere hacer el gracioso y el pobre no tiene arte, pues... es distinto. Al igual que con Cálico. La primera vez que lo vi, en Barcelona con dos compañeros, ellos se reían sin parar por las groserías que decía ese tío con capa, baboso y gordo con voz de Florentino. Pero luego en mi casa, yo me reía sola delante del ordenador mirando algunos de sus capítulos. Y es que a veces se tiene que tener la mentalidad de que la vida, cuanto más simple, mejor! Y si tienes que reírte por una tontería, te ríes sin más, por grotesca que sea… (aunque sin pasarse, que todo sentimiento mujeril tiene un límite). Y ya ves, puedo reírme con el capítulo de “Historia de Amor” de Cálico, pero sin embargo, puedo ser igual de romanticona que Ewan McGregor en Moulin Rouge. Y eso puede suceder también con los hombres. Sí que existe la simplicidad de los tíos… Pero no en todo momento ni a todos ellos. He tenido relaciones con chicos que considero maduros, pero que pueden soltar carcajadas cuando un compañero deja sangre en el vaso y le preguntan que qué comió anoche (hurra por reno!). Y no considero que sean limitados los pobres por reírse de una grosería tan grande.
Estoy de acuerdo también con la complejidad de la mujer. Si fuéramos más simples, seríamos más felices. No os creáis que todas estamos orgullosas de ser infelices a causa de la complejidad por la que somos automáticamente relacionadas.

Y siento decir que por culpa de la sociedad y los puñeteros programas basura de la TV, de los paletas del lado de tu casa que cada mañana te chillan con un palillo entre los dientes nosequé del tesoro del pirata…., hace que cada día se desprecie un poco más el querer conocer a un chico,… las mujeres comenzamos a tener una alarma en la cabeza que se dispara cuando un chico te pide la hora por el simple hecho de pensar que se te quiere tirar. Qué triste es salir corriendo y esconder tu corazón en cualquier lugar para que nadie lo pueda alcanzar. Y tan sólo por pensar que todos son/sois iguales y que todos te acabarán haciendo daño. ¿Por qué pesar eso? Quizá por las experiencias, quizá porque la sociedad de hoy en día te lo hace ver así. Cada día más violencia, más violaciones, más asesinatos, más separaciones… muchas películas que hablan de un príncipe azul que sube cada noche a tu balcón a cantarte una canción…. Pero… ¿a caso quedan hombres así? Aunque no crea demasiado en el amor en pareja y sea una desagradable contradicción, creo y afirmo que sí que existen hombres así… solo que algunos ya están ‘pillados’ y los que quedan no son reconocidos. Raül es un claro ejemplo. Se puede reír con “Chorizo de Almendralejo, las 3 primeras rodajas no tienen pellejo”, pero puede ser un romanticón de la ostia y alguien que haga feliz para siempre a su pareja (). Y personalmente, conocer a personas como Raül, me ayuda a recordar que no todos los hombres son unos cabrones o que están todos para el arrastre. Que no hace falta ser lesbiana para tener una buena relación con alguien de tu nivel! Jajajaja Sino que la paciencia y la esperanza son virtudes que se tienen que tener siempre. Ya sea para encontrar a la persona de tu vida, para cambiar el mundo…. Para lo que sea.
Gracias
‘Viu-lo’

P.D.: Por cierto, respecto al último comentario… no comparto el sentimiento de que las mujeres somos las cabronas. Por las relaciones que he tenido, podría decir lo mismo de los hombres, pero me limito a callar, simplemente por respeto a los pobres hombres que no tienen culpa de la existencia de los gilipollas esquizoides e in sentimentales que van caminando por la vida sin más objetivo que descargar su pistola cada fin de semana con una titi diferente… porque repetir con alguna de ellas sería romper con su orgullo (que triste que haya personas así… pero si eso es CARPE DIEM para muchos… que así lo vivan).
Ah! Y si todos acabamos pasando por el aro, es porque todos acabamos queriendo. ¿No? Es que me ha parecido un comentario como diciendo… “desgraciadamente, los hombres acabamos siendo unos perros atados a las patas de la cama de una mujer”.